Los socios del proyecto Retrace seguimos profundizando en el conocimiento de la Economía circular, compartiendo experiencias que se dan en diversos territorios europeos. Tras el Piamonte, Aquitania, Bizkaia y Holanda, recientemente llegaba la oportunidad de conocer buenas prácticas desarrolladas en Eslovenia.
El gobierno local eligió ocho empresas* pertenecientes al sector eléctrico, maderero, textil y gestión de residuos, entre otros; proyectos distintos entre sí que, sin embargo, comparten un enfoque sistémico en su desarrollo.
Y es que ése es el objetivo principal de Retrace: fomentar el uso del diseño sistémico como método para ayudar a las políticas regionales y locales en su transición hacia una Economía circular. Hacia un nuevo modelo de desarrollo, producción y consumo que, como explicaba Alenka Smerkolj, Ministra de Desarrollo, Proyectos Estratégicos y Cohesión, “es un área prioritaria en la estrategia de Especialización inteligente eslovena”, pero también comunitaria.
De ahí la importancia, señaló, de “establecer asociaciones de investigación e innovación que fomenten la colaboración a largo plazo”, permitan compartir buenas prácticas y “ganar en visión a la hora de generar soluciones eficientes de desarrollo”.
Exactamente lo que hace Retrace, proyecto que se enmarca en el programa Interreg Europe y está cofinanciado por el FEDER, y en el que participan las regiones de Aquitania, Eslovenia, Neamt (Rumanía), Piamonte, y Euskadi, representada por Azaro Fundazioa y Beaz.